“Es lamentable que como microempresas de la construcción en Campeche no tengamos entrada a trabajar directamente en las obras del Tren Maya como lo hacen multinacionales como Carso, pero reconocemos que nuestra capacidad operativa no lo permite, no tenemos para hacer frente a grandes contratos que requiere esa obra”, externó el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) en Campeche, Víctor Manuel Burgos Pech.
Y no es porque se le de preferencia a las factorías foráneas, sino porque son empresas grandes que tienen muchas subsidiarias y se les hace más fácil traer a sus factorías que tienen regadas por todo el país que darnos entrada.
Apoyó lo externado por otros empresarios campechanos que afirman que de los miles de millones de pesos que invierte el Tren Maya en el Estado muy poco se queda en la entidad. “Eso es cierto, es muy poca la derrama económica para las empresas que de alguna manera tienen contratos”.
Sí hay empresas trabajando, pero si lo vemos de manera global, de la millonaria derrama económica es muy poco lo que beneficia a nuestras microfactorías. Sin embargo no pudo precisar qué porcentaje pudiera ser.
Comentó que al Tren Maya están vinculados tres a cinco empresas muy poderosas, con sus prepuestos, sus análisis de costos, lo que les permite pagarle muy bien a los obreros, con salarios que van de los 3 mil 500 pesos semanales lo más bajo, trabajando 12 horas, pero ese sueldo nosotros no lo podemos pagar, lo que nos afecta porque nos estamos quedando sin mano de obra.
“Esto será transitorio, porque el año que viene el Tren Maya debe ser concluido, al menos eso se dice, y van a empezar a regresar, pero estamos deseando que no exijan esos salarios que ahora están recibiendo porque no les vamos a poder pagar.
Las estaciones serán realizar por esas grandes empresas, pero lo único benéfico es que estarán subcontratando a microsempresarios para realizar los trabajos de recubrimiento, fontanería, electricidad, aire acondicionado, entre otros.
En ese sentido, dijo que la CMIC ha otorgado información para que empresas vinculadas a esas actividades sean contactadas y beneficiadas con esos contratos, pues están por iniciar el armado de las estaciones.
Por otra parte, dijo que el Tren Maya está dividiendo pueblos, generando problemas que no se ven por ahora pero que serán una realidad, por eso se requiere de inversión para que antes de que detonen, sean paliados como el hecho de que existirán zonas que se van a inundar, van haber carreteras rotas, vías de electricidad caídas, entre muchas otras que todavía no están atendidas.
La prioridad se comprende es terminar el Tren Maya, para después emprender otro tipo de acciones para enfrentar los daños colaterales ya señalados. Si lo vemos desde el punto de vista de trabajo, será una gran oportunidad, pero no hay que dejar que se queden esas deficiencias.
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