Casi tres años sin cubrir 10 plazas administrativas en el Colegio de la Frontera Sur (Ecosur) ha generado una sobrecarga laboral que afecta la salud física y mental de los empleados, quienes reportan estrés, ansiedad y, en algunos casos, la necesidad de atención psicológica o psiquiátrica.
El personal de las cinco sedes de la institución debe asumir responsabilidades adicionales debido a las vacantes, mientras que los estímulos económicos y apoyos para actividades culturales y deportivas establecidos en el contrato colectivo siguen sin entregarse. Los trabajadores denuncian que la Dirección General de Ecosur alega falta de presupuesto, pese a que cada año existe remanente de recursos que podrían destinarse a estos rubros y a la capacitación del personal.
Además, la actualización profesional del personal depende principalmente de materiales gratuitos en línea, lo que limita el desarrollo laboral y académico dentro del organismo. Esta situación ha llevado a que algunos empleados opten por renunciar debido al estrés y la presión constante.
Los trabajadores enfatizan que la falta de disposición para negociar acuerdos ha mantenido vigente este escenario durante casi tres años, generando un entorno laboral que consideran insostenible.
El caso evidencia la necesidad de atender de manera inmediata los derechos laborales y la salud de los empleados, así como de garantizar que la institución cumpla con las obligaciones contractuales y presupuestales.






