Con carteles en mano y mensajes a favor del autoconsumo y el autocultivo, un pequeño grupo de jóvenes se dio cita en el malecón de Campeche este 20 de abril, como parte de la cuarta edición de la “Jornada Cannábica 420”. La protesta, aunque discreta en número, tuvo un mensaje claro: exigir la despenalización del cannabis en México y visibilizar a quienes han sido encarcelados por su consumo.
A lo largo del evento, los asistentes hicieron un llamado urgente para replantear la política prohibicionista que mantiene tras las rejas a cientos de personas por portar o utilizar mariguana, incluso en casos donde su uso es medicinal. La jornada se desarrolló de manera pacífica, y aunque solo participaron alrededor de seis personas, su presencia no pasó desapercibida para los transeúntes que se detenían a leer los mensajes escritos en pancartas.
El activista Marco Polo Chavarría Manzanares fue uno de los voceros durante la actividad. Subrayó que más allá de lo jurídico, existe un problema social de fondo. “Se sigue criminalizando al consumidor mientras los vacíos legales sobre el autocultivo y el uso personal generan injusticias. Hay personas detenidas por portar cantidades mínimas”, señaló.
Como parte de las acciones a mediano plazo, Chavarría anunció que su colectivo iniciará una recolección de opiniones ciudadanas sobre el uso del cannabis. La meta es integrarlas en una propuesta formal que será presentada ante la Cofepris (Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios), buscando impulsar un cambio en la regulación.
La “Jornada Cannábica 420” en Campeche se suma a otras manifestaciones realizadas a nivel nacional en esta fecha simbólica, reforzando la exigencia de una legislación más justa que deje de tratar al consumidor como delincuente.
