La pérdida de más de 7 mil empleos en Campeche al cierre de 2025 mantiene en alerta al sector empresarial, que advierte un escenario más crítico para la recta final del año. Esta cifra se sumará a los más de 20 mil trabajadores han sido despedidos en los últimos años a raíz del multimillonario adeudo de Petróleos Mexicanos (Pemex) a proveedores y contratistas.
De acuerdo con el Consejo Coordinador Empresarial de Ciudad del Carmen, la deuda de la petrolera supera los 400 mil millones de pesos, lo que ha dejado a decenas de empresas sin liquidez para sostener su operación. Encarnación Cajún Úc, presidente del organismo, advirtió que la falta de pagos ha orillado al cierre de compañías locales y a una creciente ola de desempleo que golpea directamente a las familias campechanas.
En Ciudad del Carmen, la caída de empleos se ha concentrado en los sectores vinculados al transporte marítimo, mantenimiento de plataformas y servicios de proveeduría, actividades que históricamente han sostenido la economía de la isla. Los empresarios insisten en que, sin mecanismos inmediatos como la apertura de las COPADES, será imposible revertir la tendencia negativa.
Aunque el Plan Estratégico para el Fortalecimiento de Pemex 2025-2035 incluye la reducción de los tiempos de pago a proveedores a un máximo de dos meses y la creación de un fondo de inversión a través de Banobras, la iniciativa privada en Campeche sostiene que los efectos no se han reflejado en la región. Reclaman acciones urgentes que permitan a las micro y pequeñas empresas cubrir nóminas y mantener la producción.
En Tabasco, donde la dependencia hacia Pemex es igualmente significativa, se calcula un saldo de miles de plazas perdidas en los últimos años. Sumando las cifras de ambas entidades, los empresarios estiman que para diciembre la cancelación de empleos podría superar los 27 mil.
Además del impacto económico, el retraso en los pagos a proveedores ha reducido el mantenimiento en instalaciones y plataformas marinas, lo que incrementa el riesgo de accidentes y compromete la producción nacional de hidrocarburos. Para el sector empresarial, la seguridad energética del país no puede seguir dependiendo de una petrolera que mantiene deudas por más de 431 mil millones de pesos con su cadena de proveeduría.
