En el marco del Día Internacional del Orgullo, colectivos de la diversidad sexual en Campeche urgieron al Congreso local a legislar de forma inmediata para prohibir las terapias de conversión, también conocidas como Ecosig, y para atender de raíz la discriminación que persiste en instituciones educativas y de salud.
Rodrigo Nick Castillo, presidente del colectivo “ConSentido”, afirmó que si bien se han logrado avances legales en la entidad —como el matrimonio igualitario, la Ley de Identidad de Género y la tipificación del transfeminicidio— todavía hay vacíos graves que afectan directamente a la comunidad LGBT+, en especial a las personas trans.
“El Congreso debe dar un paso decisivo para prohibir las terapias de conversión, porque son una forma de violencia. No hay nada que curar. Estas prácticas atentan contra la dignidad y los derechos humanos”, señaló el activista.
También denunció que muchas instituciones continúan reproduciendo prácticas discriminatorias bajo supuestos administrativos o religiosos. “En las escuelas hay docentes que restringen la expresión de género de estudiantes, y en centros de salud, personal que se niega a respetar el nombre o identidad de las personas diversas. Eso también es violencia institucional”, remarcó.
Los colectivos exigieron además que se impulsen políticas públicas con enfoque de derechos humanos, que incluyan capacitaciones obligatorias para personal médico, administrativo y docente, así como campañas de sensibilización permanentes.
A pesar de algunos avances, afirmaron, el Estado no ha logrado garantizar condiciones reales de igualdad para la comunidad LGBT+, por lo que llamaron a las autoridades a actuar con decisión y no solo con gestos simbólicos.
“Las banderas no salvan vidas. Lo que salva vidas es una ley que prohíba las terapias de conversión, atención médica sin discriminación, y escuelas donde todas las personas puedan ser quienes son”, concluyeron.
