La violencia desatada durante la Semana Santa en Campeche dejó un saldo trágico de tres muertos y cinco heridos, todos ellos víctimas de ataques armados en los municipios de Campeche, Carmen y Champotón. Los hechos, que involucraron a sicarios que se desplazaban en motocicletas, parecen estar vinculados a disputas entre grupos de narcomenudeo, según informaron las autoridades.
Las víctimas fatales, algunas de ellas con antecedentes penales relacionados con la venta o consumo de drogas, reflejan el creciente clima de inseguridad en la región. La competencia entre bandas del crimen organizado por el control del mercado local de narcóticos parece estar alimentando estos actos violentos, los cuales ocurren cada vez con mayor frecuencia y a menudo a plena luz del día.
Uno de los ataques más violentos ocurrió en la colonia 23 de Julio, en el municipio de Carmen, donde un hombre fue interceptado por dos sicarios en motocicleta, quienes le dispararon a quemarropa en múltiples ocasiones. Aunque la víctima fue trasladada con vida al hospital, falleció horas después, convirtiéndose en la octava víctima de ejecución durante la temporada vacacional. Este suceso elevó el número de muertes violentas en la región a 30 en lo que va del año.
Otro episodio violento se registró en Champotón, donde Alfredo M.L., de 52 años, fue acribillado a tiros mientras viajaba por la carretera San Antonio del Río Blanco. Su cuerpo fue encontrado entre la maleza por vecinos del lugar. Este ataque fue el sexto homicidio del mes y el primero durante la Semana Santa.
El hallazgo de un cuerpo sin vida, con signos de tortura y disparos, ocurrió en la brecha de San Pablo Pixtún, también en Champotón, donde L.R.G., reportado como desaparecido, fue encontrado con un tiro en la cabeza y en avanzado estado de descomposición. L.R.G. había sido secuestrado el sábado, y su cadáver apareció días después.
La violencia no cesó durante el fin de semana, cuando otro ataque tuvo lugar en la misma localidad de Champotón, donde un hombre identificado como A.F.H.G., de 30 años, fue emboscado mientras conducía su motocicleta. Recibió varios impactos de bala antes de caer al suelo, sufriendo también una amputación en uno de sus dedos. Aunque su estado de salud es grave, se encuentra estable tras ser hospitalizado.
Además de estos casos, otros cinco individuos resultaron heridos por armas de fuego en diversos puntos del estado, aunque sus condiciones de salud fueron reportadas como estables.
A pesar de la gravedad de estos ataques, las autoridades aún no han logrado realizar detenciones. La Fiscalía General del Estado continúa con las investigaciones, mientras se manejan como hipótesis los conflictos entre grupos de narcotraficantes como principal causa de la violencia registrada en esta Semana Santa.
