En su segundo día de viajes el Tren Maya tuvo un retraso de poco más de dos horas respecto a su esquema de horarios en estaciones y paraderos de la ruta Cancún-Teya-San Francisco de Campeche, esto, para contener posibles daños mayores y corregir daños menores como el funcionamiento de amenidades con energía eléctrica, según relató el personal de cargo.
Las salidas de Cancún a Teya sufrieron un pequeño retraso de 15 minutos debido al abordaje de los pasajeros que ya tenían sus boletos de ida y vuelta de Campeche, muchos de ellos viajaron el sábado en el primer viaje oficial comercial del tren, y decidieron regresar el domingo a su ciudad de origen. Algunos incluso llegaron a Cancún en clase turista y regresaron en clase premier, y a voz de ellos, la diferencia no es mucha, incluye un box lunch.
Sin embargo, en esta ocasión fue más notoria la baja velocidad con la que el tren se dirigía a su destino, pues viajeros señalaron que sí es una molestía lo lento del trayecto, pues a pesar de venir cómodos y emocionados por ver en marcha el proyecto prometido por el presidente Andrés Manuel López Obrador, si tuvieran un itinerario ajustado o una cita no podrían confiar en llegar a tiempo.
Luego de llegar al paradero de Maxcanú el tren retomó su camino a velocidad constante, sin interrupciones, salvo que paró un par de minutos en las estaciones de Calkiní, Hecelchakán y Tenabo, para corroborar el funcionamiento de todos los sistemas correctamente.
Finalmente el transporte llegó aproximadamente a las 19 horas, es decir, ocho horas de viaje, dos más de lo previsto por la dirección del Tren Maya a cargo de la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena).
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